Aguilera apela al apoyo de los grupos parlamentarios para superar los problemas estructurales del aceite

En su comparecencia parlamentaria de hoy, la consejera de Agricultura ha respondido a una interpelación del portavoz del PP, Fernández de Moya, y ha propuesto a las autoridades comunitarias que se reformen y actualicen los mecanismos de gestión de crisis en la nueva PAC.

La consejera de Agricultura y Pesca, Clara Aguilera, ha pedido, en el marco del debate de la futura Ley del Olivar, la complicidad de las distintas fuerzas políticas, por encima de intereses electorales, para resolver entre todos el problema de bajos precios en el aceite de oliva que, tal y como ha remarcado, se debe a causas estructurales, más que coyunturales. La consejera, que ha hecho estas declaraciones en respuesta a una pregunta del grupo parlamentario del PP sobre la última negativa de la UE a activar el mecanismo de la intervención privada, ha asegurado que desde la Junta se está trabajando para resolver algo más que un problema puntual de precios en el sector oleícola y que desde su departamento se  va a continuar en esa línea.

Asimismo, ha insistido en la necesidad de que la futura PAC refuerce y actualice los sistemas de regulación de mercado existentes, con la finalidad de que se pueda dar respuesta de una manera eficaz las situaciones de crisis de precios. Entre estos mecanismos, en los que se pide que los precios de referencia para su activación se vinculen a los costes reales de producción, se encontraría el almacenamiento privado, una herramienta que, hoy por hoy, “se demuestra ineficaz”, debido a esa falta de actualización de sus precios. La actualización de los mecanismos de gestión de crisis es una de las propuestas que Aguilera ya ha trasladado personalmente a las autoridades comunitarias.

Interpelación del PP

El presidente provincial y portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Popular de Andalucía, José Enrique Fernández de Moya, interpeló a la consejera de Agricultura, Clara Aguilera, ante la negativa la Comisión Europea a permitir la activación del mecanismo de ayuda al almacenamiento privado del aceite de oliva.

De Moyua recordó a la consejera que “el pasado 18 de marzo, el Consejo de Ministros de Agricultura votó a favor de la activación, estando entre ellos, representados los países de Chipre, Grecia, Portugal, Francia, Polonia e Italia, sin que ninguno de los 20 países restantes mantuvieran una posición contraria”. Por eso, advirtió a Aguilera que “parece más bien que se está ninguneando al sector oleícola de la Comunidad Autónoma y de España”.

Fernández de Moya señaló que “el nuevo desplante de la Unión Europea al sector en España responde probablemente a la pérdida de peso político y social del Gobierno español, con Zapatero a la cabeza, y al hecho de que nuestro país adolezca del peso específico necesario en los órganos comunitarios”.

Por ello, el diputado popular advirtió que “se está engañando a los agricultores jiennenses, andaluces y españoles” y le recordó que “el sistema PoolRed fijaba esta misma mañana en 1,85 euros el precio del kilo de aceite oliva virgen”. Insistió además, en que “el 90 por ciento de las explotaciones agrarias que en Jaén se dedican exclusivamente al olivar están dejando de ser rentables, puesto que debería alcanzarse un mínimo de 2,30 o 2,40 euros por kilo de aceite, con el fin de situarse en el suelo de la rentabilidad para el conjunto de las 109.000 familias que, sólo en la provincia jiennense, dependen del Olivar”.

Justificado

Según ha señalado Aguilera, el principal motivo para esta nueva negativa de la UE a autorizar la activación del almacenamiento es que el precio del aceite sigue estando por encima de los umbrales requeridos para la puesta en marcha de este mecanismo, pese a las dificultades actuales por las que atraviesan los agricultores debido a los bajos precios de este producto. La consejera ha insistido en que la activación del almacenamiento está justificada porque existe una clara perturbación del mercado.

De todas formas, Clara Aguilera ha apuntado que esta medida aportaría una “solución coyuntural” al problema que atraviesa el sector, que debe seguir potenciando su capacidad de influencia y negociadora, integrándose y desarrollando estrategias comunes para comercializar mejor el producto. Además de esta medida transitoria, los agricultores tienen que poner en marcha nuevas medidas que les permitan ganar en dimensión y competitividad, a través de estrategias como la concentración de la oferta.