Las jienenses cobran un 30% menos que los hombres por el mismo trabajo y sólo 3 de cada 10 están en un sindicato

Este martes, 8 de marzo, celebran su día internacional. Constituyen el 55% de los parados que hay en la provincia (28.336 sobre 51.700), tienen que trabajar 418 días para cobrar lo que un hombre en 365 y sólo 3 de cada 10 militan en un sindicato. Son las jienenses trabajadoras, un sector especialmente castigado por la crisis para las que lo de la conciliación laboral es sólo un texto en un papel. A las 5 de la tarde, manifestación del Dia de la Mujer en Jaén capital.

Corren malos tiempos para las mujeres jienenses que quieren incorporarse o mantenerse en el mercado laboral. Trabajos precarios, menos sueldos que los hombres, escasa afiliación sindical y harto difícil el poder conciliar vida laboral y familiar. El panorama para las jienenses trabajadora en el Día Internacional no ha mejorado precisamente este 2011. Más bien al contrario, según los datos que facilitan las estadísticas oficiales y las de los propios sindicatos, la situación de la mujer trabajadora en Jaén ha empeorada en los últimos años a raíz de la crisis económica.

Al desempleo galopante (aunque los hombres parados van ganado terreno en los últimos tres años), que según los últimos datos está en un 55% (hace tres años estaba en un 60%), las féminas jienenses unen las propias condiciones laborales: mayores jornadas y menores sueldos que los hombres.

Según los últimos datos del paro de febrero, son 28.336 las mujeres desempleadas que se registran en la provincia frente a los 23.445 hombres y aunque la subida de las mujeres ha sido menor en ese mes, lo cierto es que “tras los primeros años de crisis económica donde el hombre ha sido el más perjudicado, sobre todo por el desplome del sector de la construcción, hemos visto como estos han ido ocupando los puestos de trabajo donde las mujeres habían encontrado un lugar donde ejercer un empleo”, comenta Paqui López Rosa, de la secretaría de Mujer de Comisiones Obreras, quién señala que puestos de la hostelería, y algunos de los que tradicionalmente se beneficiaban las mujeres en el campo, están siendo ocupados ahora por .

Por su parte, Capilla Vega, de la Secretaría de Mujer de UGT, comenta que la crisis está castigando especialmente a las mujeres, y el proceso de incorporación de la mujer en el mercado laboral se está viendo roto por la situación económica y porque, además, las salidas que se esgrimen para escapar de la crisis no contemplan a las mujeres. “Nos encontramos hoy en un contexto de crisis económica en el que las políticas macroeconómicas están desplazando el esfuerzo y la preocupación por las políticas de igualdad que años atrás habían adquirido gran relevancia. Los recortes en el gasto público están limitando y eliminando los distintos programas que las asociaciones de mujeres llevan a cabo, y por ello, incluso los avances conseguidos hasta ahora podrían dar un enorme paso atrás”.

Desigualdades

Vega explica que pese a las leyes y a las numerosas denuncias sindicales, aún persisten las desigualdades retributivas entre hombres y mujeres. “Las mujeres tienen que trabajar 418 días, para tener el mismo salario que perciben los hombres en un año (365 días)”. Desde CC OO se apunta que la mujer cobra un 30 por ciento menos que los hombres. “Ésta discriminación distributiva es una de las más graves que las mujeres padecen y como consecuencia más directa de ella es la menor protección social que tendrán en un futuro (tanto en su jubilación futura como a la hora de cobrar la prestación por desempleo)”, señala López.

Los sindicatos critican que la crisis económica y las reformas laborales que se están llevando a cabo están recortando los derechos adquiridos. “Con la Ley de Igualdad Efectiva entre mujeres y hombres se consiguió avanzar en cuanto a la protección del despido por embarazo, lactancia, riesgo por embarazo, etc. Sin embargo, como consecuencia de la Reforma Laboral, son muchas las mujeres que acuden a CCOO para pedir asesoramiento y ayuda al ser despedidas por estos motivos”, apunta Paqui López. Desde Comisiones insisten en que aunque se ha avanzado mucho en conciliación “formal”, la conciliación “real” no existe, bien por que las empresas no facilitan medidas que la favorezcan y en el mayor de los casos porque los hombres aún no se hacen responsables del cuidado de hijos e hijas y de los mayores que tengan a su cargo. En este sentido, Capilla Vega, desde UGT, manifiesta que “ante un panorama laboral caracterizado por la temporalidad y el incumplimiento reiterado de los derechos laborales reconocidos, las mujeres tienen que seguir haciendo frente a las responsabilidades laborales y domésticas, puesto que en este país casi todos los hombres “ayudan” pero ninguno comparte”.

Afiliación sindical

Tampoco en lo que respecta a afiliación sindical se encuentran datos optimistas en lo que respecta a la mujer. Del total de afiliados de los dos sindicatos mayoritarios en la provincia (UGT y CCOO), sólo un 33,3 por ciento representa el porcentaje de mujeres afiliadas. Son 32.422 los afiliados que se contabilizan entre ambas agrupaciones, de los que sólo 10.812 son féminas frente a 21.608 hombres.

En UGT los afiliados totales son 20.660, de los cuales 6.436 son las mujeres y 14.224, más de la mitad, son hombres. En el caso de Comisiones Obreras, de los 11.762 afiliados registrados también los hombres son mayoría con 7.384 frente a las 4.378 afiliadas.