Jaén duplica su superficie y producirá más de 5.000 toneladas de ajos, un 10% más que la pasada campaña
La provincia ha duplicado la superficie de plantación en los últimos años, superando las 500 hectáreas que se encuentran en plena recolección del ajo temprano, un producto que mantiene un precio por encima del umbral de rentabilidad.
La campaña del ajo temprano ya está en marcha y con muy buenas perspectivas para el sector. El precio se está manteniendo por encima del umbral de rentabilidad, y con una producción más abundante que anteriores campañas. Además la producción va en aumento, y la calidad del ajo esta campaña es muy alta, según ha manifestado Juan Garrido, presidente de la Asociación Andaluza de Ajeros, y miembro de la Mesa Nacional del Ajo. “Se estima que ha subido un 10% la producción respecto al año pasado, ahora ya superamos las 500 hectáreas, hemos conseguido duplicar la superficie de plantación en los últimos dos o tres años, por eso la provincia podría generar unos cinco millones de kilos de ajo aproximadamente, o incluso más porque cada hectárea está mejorando su rendimiento, el ajo viene con más tamaño y mayor calidad. No habrá cifras exactas hasta el fin de la campaña, pero lo más importante es su repercusión en la provincia, el ajo es un producto social, comen muchas familias de él, según los datos de la Junta de Andalucía da más de 100.000 jornales en Jaén, entre la siembra, recolección, manipulado y empaquetado”.
El ajo spring temprano es la principal variedad escogida por los agricultores de la provincia, puesto que genera una mayor producción y le afectan menos las plagas y enfermedades que a otras variedades como el ajo rojo o morado, o el ajo blanco, que se cultiva cada vez menos, y sólo en zonas del centro y norte del país. Ya se han empezado a coger en muchas de las fincas productoras, y conforme se recolectan, se van dejando unos días para que se sequen, y después se cortan, quitándoles la raíz y el tallo, y se dividen por calibres para su comercialización. La recogida se ha retrasado unos diez días por las lluvias que vinieron en mayo, lo que preocupó al sector, pero lo cierto es que han venido muy bien al producto, la calidad es superior a la de campañas anteriores.
Con un ajo más grande, el peso de la producción en cada hectárea se incrementa, y teniendo en cuenta que hay entre un 5 y un 10% más de superficie plantada, superando ya las 500 hectáreas, la cantidad de la que se dispondrá será, al menos, un 10% superior a la de 2015, o incluso más, por ese mencionado incremento del peso del ajo. En principio la estimación inicial es de unas 5.000 toneladas en nuestra provincia. En unos quince días terminará la recolección del ajo spring, y se inicia el del ajo morado, del que también hay algunas hectáreas en Jaén. Para julio ya se podrá hacer balance en toda Andalucía del resultado de la campaña, y comenzarán a preparar y guardar el ajo para su distribución y consumo durante todo el año.
Precios
El precio del ajo en origen se sitúa en la actualidad en torno a los noventa céntimos a un euro el kilo, aunque es un valor medio orientativo que varía en función de la variedad y el calibre del ajo. El umbral de rentabilidad para el productor ronda los ochenta céntimos de euros por kilo, por tanto están logrando un nivel aceptable de beneficios que permite que continúen cultivando este producto, y que cada vez más agricultores se decanten por el ajo para sus terrenos. En anteriores campañas ha influido en los precios el mercado exterior, puesto que China, que es el principal productor mundial, tiraba los precios por el suelo. Pero esta vez dicho país ha tenido una menor producción y está manteniendo los precios altos, por tanto no compite en Europa con el ajo español, como señala Juan Garrido. “Hay buenas perspectivas porque a igualdad de precios, los países europeos demandan nuestro ajo, porque es de mejor calidad y tiene los productos fitosanitarios adecuados, en eso son muy estrictos en la UE, sin embargo algunos ajos que vienen de China no llevan los productos que deberían. El ajo español es más demandado y querido cuando no hay mucha diferencia de precios, por eso esta campaña esperamos que buena parte de nuestro producto se vaya al exterior”. En el mercado interior, también se ha observado un cambio de tendencia, dirigida hacia una mayor demanda del producto nacional. Las grandes superficies comerciales, años atrás, importaban del gigante asiático grandes cantidades, pero esto ya no es así. “Quizá por la demanda de los clientes o bien porque el precio se ha igualado, en los últimos años compran en primer lugar ajo nacional, nuestra calidad es infinitamente mejor, y si necesitan más, ya traen de fuera”.